Un ricachón mentecato,
ahorrador empedernido,
por comprar jamón barato
lo llevó casi podrido.
Le produjo indigestión
y, entre botica y galeno,
gastó doble que en jamón…
por no comprar jamón bueno.
Y hoy afirma que fue un loco;
puesto que econnomizar
no es gastar mucho ni poco,
sino saberlo gastar.
Escucha el poema AQUÍ